Fundada por Gonzalo Suárez Rendón el 6 de agosto del año de 1539, cuenta según los datos del censo de 2005[], con una población de 151.082 habitantes, aunque está experimentando un fuerte crecimiento poblacional. Se ha consolidado como una ciudad modernista y con urbanismo contemporáneo y organizado; Tunja Distrito Histórico y Cultural que para el 2007 ha aumentado su crecimiento urbanístico con la llegada de varias franquicias y empresas nacionales y multinacionales.
Tradicionalmente y por la naturaleza económica de sus principales actividades, como la agricultura y ganadería, Boyacá y Tunja específicamente han llevado a cabo sus actividades comerciales en lugares denominados como plazas de mercado, que desde 1675 tenían lugar en la Plaza de Bolívar, donde se llevaban a cabo todas las ferias y fiestas de la ciudad y se reunía un gran número de personas alrededor de esta actividad comercial.
En 1913 el gobierno nacional mediante la ley ocho decide conmemorar el primer centenario de la independencia de Colombia promoviendo en la ciudad de Tunja una exposición nacional de ciencias, y ordena la construcción de los pabellones necesarios para el evento de forma tal que con posterioridad se pudieran utilizar como plaza de mercado. El pabellón central se termina en 1919 para conmemorar el centenario de la batalla de Boyacá, y a partir de 1923 se le agregaron los pabellones laterales. Estas obras se terminaron en 1939, celebrando así el cuarto centenario de la fundación de Tunja.
Esta plaza se ubico entre las calles 20 y 21 con carreras 12 y 14 en una zona céntrica de la ciudad a tan solo tres cuadras de la plaza de Bolívar y es lo que actualmente hoy conocemos como Plaza Real, y por mucho tiempo fue el único centro de abastos de la ciudad de Tunja.
Aproximadamente hacia finales de la década de los ochenta y comienzos del noventa, se realizo el traslado de la plaza de mercado desde la Plaza Real hacia el sector sur de la ciudad, donde se encuentra situada actualmente. Este traslado se dio debido al crecimiento rápido de la ciudad, la cual por ser capital de departamento, vio la necesidad de restaurar los sitios históricos de la ciudad y mejorar su aspecto e imagen, llevando así a este comercio y sus problemas hacia las afueras de la ciudad